Un casco de 1890
Cabalgatas y comida casera en una histórica estancia bonaerense
La estancia La Oriental es uno de los pocos lugares históricos que se conservan en buen estado cerca de Buenos Aires, a 250 kilómetros, en Junín.
Se trata de un casco de 1890 abierto al turismo desde hace 15 años. "Trato de mantenerlo siempre un poco mejor", explica Estela Torello, dueña del lugar junto con su marido, Rafael. La pareja suele recibir personalmente a los turistas, que cada año se sorprenden con pequeñas mejoras: un solárium de piedra gigante en la pileta que inauguró la temporada; una cocina totalmente remozada con cerámicos nuevos, bachas más grandes y otros detalles; blanquería y flamantes colchones para los cinco cuartos y dos departamentos de techos altos y camas antiguas...
La estancia, de 1050 hectáreas, está en plena producción agrícola-ganadera; hay cría de hacienda y cultivo de soja, trigo y maíz. Los turistas interesados pueden subir a las cosechadoras actuales (muy altas con aire acondicionado, totalmente computarizadas) o asistir a la tarea rural de turno de ese día.
La importante escalera da a la galería del casco, cubierta de rosas, y la entrada del living con boiserie de principios de siglo este año sumará un aire acondicionado. "Los techos son altísimos y las paredes gruesas, todo eso hace que la casa se mantenga fresca. Los turistas no quieren que tenga todo a oscuras como hacían antes nuestras abuelas", cuenta Estela.
Frente a la casa hay un bosque y una capilla; hacia atrás, una larga avenida de árboles conduce al hogar de los dueños de casa. Dentro de la estancia, pero a una distancia de carruajes o caballos, la costa de la laguna El Carpincho invita a pescar o remar en canoa o kayak. Enfrente, una casa alquilada se suma a la capacidad de alojamiento del casco principal.
Apto para celíacos
"Desde hace unos años descubrí que soy celíaca. Por eso comencé a ofrecer menús para los que tienen esta enfermedad, se les hace muy difícil viajar con su vianda y su pan", explica Estela. Los celíacos no pueden consumir harinas de trigo, cebada, centeno y sus derivados. Por eso, dadas las restricciones, es importante tenerlos en cuenta a la hora de comer.
"Hacemos chorizos caseros; carne; pastas con harina especial; desayunos con pan, tortitas y panqueques para que todos puedan comer. Hasta los postres, como el volcán de chocolate, son aptos para celíacos y todos pueden comer tranquilos. Como tenemos que hacerlo igual porque padecemos la enfermedad, para nosotros no es un problema", apunta Estela.
La comida es casera, sin presentaciones rimbombantes, ya que la dueña se dio cuenta de que eso es lo que los viajeros quieren comer.
Finalmente, la profesora Amelia Ricci enseña a extranjeros y locales que jamás anduvieron a caballo o sienten aprensión a subir por haber vivido algún episodio traumático.
Las clases duran de una a dos horas. Se enseña sobre el caballo, con la montura, las riendas, y después se sale a campo abierto.
Por Silvina Beccar Varela
Datos útiles
Informes
* Día de campo: $ 110
24 horas: con todas las comidas, sin bebidas, entre $ 260 y $ 300 por persona, según el cuarto elegido. 02362-433533/ 02362-156408666. En Buenos Aires: 4801-4876. www.estancia-laoriental.com Sólo con reserva
Cómo llegar
* Tomar el Acceso Oeste (Luján) y luego la ruta 7 hacia Junín. En esta ciudad, hay que tomar la avenida Circunvalación por 8 km hasta la entrada del Club de Pescadores, sobre la laguna del Carpincho, a la derecha. Es un camino de tierra que corre paralelo a las vías hasta cruzarlas, ya en la entrada del establecimiento. Hay que cruzar las vías con precaución porque el tren pasa de vez en cuando.
Fuente: La Nacion
Nuk ka komente:
Posto një koment