Buscador

ESCAPADAS - ITUZAINGO

e hënë, 19 nëntor 2007



Un asadito en familia

La parrilla Estancia Gaona ofrece una variada carta de platos tradicionales, juegos para chicos, deportes y un generoso parque.

La historia cuenta que en el siglo XVII Ituzaingó era elegida por las incursiones militares como primera parada obligada del Camino Real hacia el resto de las colonias españolas. Pero los tiempos cambian y en la actualidad, allí se levanta un polo gastronómico junto a la Colectora del Acceso Oeste. La parrilla Estancia Gaona es, entre otras, una de las mejores propuestas de carnes al asador. Al quincho para 140 comensales se suman veinte mesas en una galería descubierta y en el parque, una carpa anexa para eventos y un "Comedor al paso". Lo ideal es llegar al mediodía, para conseguir un lugar a la sombra de pinos, fresnos y acacias, ya que es doble el placer de almorzar en contacto de la naturaleza.

A diferencia del menú a la carta de lunes a sábados, los domingos rige la modalidad "tenedor libre", que incorpora pastas caseras y minutas a las parrilladas. Sin puestas decorativas, los platos se destacan por su calidad y abundancia. La entrada sugiere provoleta, lengua a la vinagreta, vitel thoné, matambre con ensalada rusa, papas fritas y puré. Mientras los adultos siguen con achuras, matambrito al horno de barro, bondiola, lechón al asador y pechito de cerdo, los chicos pueden pedir ñoquis, canelones, sorrentinos o tallarines con salsa a elección. Todo es tradicional.

Después del postre (helado, flan y budín caseros, duraznos y zapallos en almíbar), nada mejor que pasear en bicicleta o caminar por el parque para hacer la digestión. Otros prefieren una siesta a la sombra, descansar o dedicarse a la lectura o matear.

Los niños, en cambio, se divierten con magos, acróbatas, payasos, mimos, juegos inflables, hamacas, toboganes y calesitas. En las canchas de fútbol y vóley se improvisan partidos entre familias enteras. Hasta que el sol se esconde y abre sus puertas en el mismo predio la confitería Off Road. Lentamente, entre tés, cafés y dulces, se emprende el regreso a casa, satisfechos.

Fuente: Clarin

Nuk ka komente: