Pistas sobre Cerro Bayo
Al sur de Neuquén, uno de los centros más selectos del país brinda todo lo que requiere el esquiador exigente.
Basta con clavar los esquíes por un instante y alzar la mirada para saber que no hay razón que pueda juzgar esta geografía cuya belleza intimida. Uno se desliza cuesta abajo y allí está, a lo lejos, ese contorno tan desparejo y tan armonioso del lago Nahuel Huapi y la fuerza que impone la cordillera. Se adivinan también las chimeneas humeantes, el olor a ciervo ahumado y el crujido de los pasos de algún caminante solitario entre la naturaleza camuflada bajo la nieve. Villa La Angostura, en el sur de la provincia de Neuquén y a 76 kilómetros de Bariloche genera una combinación única e irrepetible de ocio visual con actividades para todos los gustos (esquí, trekking, mountain bike, aventura) y una gastronomía exquisita, que sacia a los estómagos más exigentes.
Pese a la importante convocatoria turística -en invierno y en verano-, las estrictas normas de construcción de la villa buscan preservar el paisaje natural, el verde, el perfil propio de una aldea de montaña.
Un centro boutique
Autoproclamado "primer Centro de Esquí Boutique de la Argentina" -que significa, esencialmente, brindar un atención absolutamente personalizada-, Cerro Bayo está a 9 kilómetros del centro de la villa y convoca a quienes quieren disfrutar de los deportes de invierno.
El cerro tiene más de 200 hectáreas de pistas para la práctica de esquí alpino, con alternativas para todos los niveles (básico, avanzado y experto) y un importante equipo de asistentes, instructores y pisteros, al servicio del visitante. Hay pistas verdes, azules, rojas, negras, fuera de pista y también se ofrece la posibilidad de jugar con trineos y realizar caminatas con raquetas por los bosques.
Como su nombre hace suponer, "Panorámica", una de sus 21 pistas, regala al esquiador una vista majestuosa de árboles frondosos cubiertos de nieve y con el Nahuel Huapi en el fondo. Los paisajes se van desplegando en el descenso. De hecho la revista National Geographic catalogó a la vista desde el cerro Bayo como una de las 10 mejores del mundo.
Freestyle y tardes de jazz
Familiar y exclusivo, este centro de esquí cuenta con 6 telesillas dobles, 2 monoplaza y 4 tele esquí. Tiene, además, tres "Freestyle Park". El primero está ubicado en la pista 18, el segundo, el "Extreme Playground" está en la pista Pudu y el tercero está pensado para los más pequeños.
Además de tener Wi-Fi, pases magnéticos y mejoras en el área de principiantes, resulta innovadora la implementación del sistema Localizar-t de GPS, que permite ubicar a cualquier persona dentro de la montaña.
Las tardes de la temporada de invierno contemplan diferentes actividades culturales y deportivas como torneos de rugby y polo, eventos itinerantes de Ski & Snowbard, desfiles y hasta un ciclo de música Bossa & Jazz. El próximo miércoles comienza, además, el cuarto Encuentro de Chefs en Altura: durante cuatro días un chef residente y un chef invitado se juntan en restaurantes de la villa o refugios gastronómicos de montaña para deleitar con sus creaciones conjuntas.
Los senderos que rodean y atraviesan a esta "villa de montaña", como les gusta llamarla a los locales, descubren a cada paso bosques de coihues, lengas o ñirantales, aves y animales silvestres. Parte del circuito histórico, el visitante puede acercarse a la arquitectura del prolífico Alejandro Bustillo en la capilla pintoresquista Nuestra Señora de la Asunción de 1936, o en el Messidor, de 1942, castillo francés donde en 1976 estuvo detenida la ex presidenta María Estela Martínez de Perón, y hoy es residencia oficial del gobierno provincial.
Si la nieve lo permite, algunos paseos dejan descubrir miradores, verdaderas ventanas al paisaje patagónico, como el Belvedere o algún salto de agua como la cascada Inacayal, de 50 metros.
En la punta de la península de Quetrihué, viven los arrayanes.Desde 1971 están protegidos dentro del Parque Nacional Los Arrayanes. Poblado de cortezas color canela y manchas blancas irregulares, es el único bosque de esta especie en el mundo. Y una vez más, al recorrer ese sendero que zigzaguea entre los árboles, sentirá que en Villa La Angostura, la belleza parece infinita.
Fuente: Clarin
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